Somos sacerdotes reales (de realeza), representantes de Cristo, y nuestra
misión es repartir al Señor. Dios nos abre el Cielo y nos da visiones solo cuando entendemos que somos real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios para anunciar las virtudes de Aquel que nos llamó de las tinieblas a la luz admirable.
Este curso es una guía para aprender a ejercer como sacerdotes y ejercitar a diario el poder encerrado en las cargas que Dios nos da.
La materia "Soltar la Carga" invita a los estudiantes a experimentar la libertad espiritual que proviene de rendir sus preocupaciones, luchas y problemas a Dios.
Antes de comenzar:
Estamos muy contentos de que hayas decidido embarcarte en este viaje con nosotros. Este espacio está diseñado para ayudarte a profundizar en tu relación con Dios, comprender mejor Su propósito para tu vida y experimentar una transformación desde adentro. Aquí encontrarás enseñanzas prácticas y espirituales, que esperamos te inspiren y desafíen a crecer en fe.
Explicación de cómo la vida en el Espíritu es sencilla, en contraste con la complicación del alma.
Ejercicio práctico de simplificar nuestra relación con Dios y enfocarnos en Su sencillez.
Entender nuestro llamado como sacerdotes y cómo esto transforma nuestra visión y acciones diarias.
Ejercicio práctico de vernos como sacerdotes en todas las áreas de nuestra vida.
La importancia de reflejar el carácter de Cristo en nuestras vidas.
Ejercicio práctico de orar para que el carácter de Cristo se manifieste en nosotros.
Exploración de diferentes aspectos de la naturaleza y carácter de Dios.
Ejercicio práctico de meditar en las nuevas revelaciones de Dios en nuestra vida.
Profundización en las diferentes facetas de Dios y cómo aplicarlas en nuestra vida diaria.
Ejercicio práctico de aplicar las nuevas revelaciones de Dios en nuestras acciones cotidianas.
La práctica de soltar nuestras cargas a Dios y confiar en Su provisión y guía.
Ejercicio práctico de entregar nuestras cargas a Dios diariamente.
El cierre de la materia "Soltar la Carga" invita a los estudiantes a reflexionar sobre el viaje realizado, reconociendo las cargas que han entregado y el descanso que han encontrado en Cristo. Este cierre destaca la importancia de mantener un corazón abierto para rendir continuamente todo peso al Señor, viviendo en la libertad y paz que Él ofrece.